lunes, 16 de mayo de 2022

Día Final

 Hola, 

si estas leyendo esto es porque conocías este blog o porque llegaste casualmente. Si no habías venido antes por aquí, te ruego leas desde el principio, solo te tomará un rato. Leer las últimas entradas publicadas (que son las que primero aparecen) no te hará tener una idea clara de que hablo. Son once años de una vida que he intentado decorar para que pareciera amable pues los momentos negros, preferí colorearlos. A ti lector/a solo te tomará un rato.  

Si no sigues leyendo, te deseo buen día, si elijes mirar por encima las últimas entradas en acto claro de rebeldía a mi petición, te diré que un poco de rebelión de vez en cuando es buena cosa (Thomas Jefferson). Y si por el contrario accedes a leer desde el principio, deseo de todo corazón que algo pueda servirte, pues esto fue lo que me motivó a escribir. Te adelanto que no soy ni de lejos un erudito, pero da igual, "cuando el alumno está preparado, el maestro aparece" (proverbio budista)

domingo, 24 de abril de 2022

Día menos dos

Acabando este camino estoy pero antes de irme quisiera hablar de ello:

Aceptarse a uno mismo:

Hace muchos años fuimos contratados todas mis formas de ser y yo como unicos actores para representar teatralmente mi vida. En la actualidad, aun sigo cada día actuando en dicha obra. 
Prácticamente todos mis personajes se mantienen escondidos detrás del telón esperando ansiosos a que les avise el "director" para salir a actuar. Ya sea en la escena o entre bambalinas observan con miedo atroz al público del momento: ¿quien ha venido esta tarde? ¿serán amables? ¿exigentes?. 
Hay uno o dos de mis actores que prácticamente viven en el escenario, quizás porque fueron de los primeros en salir a escena o quizás por haber sido bien recibidos por el público desde el principio y  el "director", ávido de aplausos, los llama a interpretar con mayor frecuencia. Como todo buen "director", el nuestro alberga el deseo de mantener el éxito de esta gran obra para que siga en cartelera muchos años y conseguir que las "criticas teatrales" sean benévolas para conmigo.
Pero he aquí el centro del conflicto de esta pequeña compañía. De todos aquellos que se mantienen a la espera de su gran oportunidad, algunos se les permite salir solo en las tardes de lunes laborales habida cuenta de que el público será minoritario; otros aparecen repentinamente unos instantes cuando por descuido del "director", dichos marginados salen al escenario sin permiso y con tal ansiedad, que su debut se convierte en una suerte de venganza para con la obra.


De vez en cuando salto a la butaca para poder contemplar la obra. Aplaudo cuando alguno de mis actores, viejo en la compañía pero novel en el escenario hace acto de presencia. Deseo hacerle saber que solo salir a interpretar su papel en esta obra ya es gran parte del éxito. 


He reservado esta noche para cenar, un mesa en el mejor manicomio de esta ciudad. Invité para la ocasión al "Director" de mi obra, a los "críticos teatrales", a un representante de los marginados y uno  de los que actúan siempre. Para beber pediré varias botellas de humildad; El primer plato lo comeremos de pie, el segundo sentados en la silla del que tengamos "mas lejos de nuestra zona de confort"

De postre degustaremos silencio.


Me hago viejo y me doy cuenta que ser famoso no me hace feliz. He buscado la salida de este lugar muchas veces, embelesado por la publicidad de los entreactos que me prometían la iluminación si desterraba de mí el amor al teatro. He sido vilipendiado con mas frecuencia de lo soportable por un público feroz y sin escrúpulos. Aun así, merece la pena y la alegría seguir actuando lo mejor que pueda. 

Mañana vendré de nuevo y saldré al escenario con mis compañeros de fatigas en una representación mas.


sábado, 2 de abril de 2022

Día menos tres

 La soledad hizo de mi vida su refugio. 

Hace mas de dos meses que tengo una lesión en la rodilla por lo que estoy de baja sin poder salir casi de casa mas allá de comprar e ir al medico en la mayoría de las ocasiones. He recibido algunas pocas visitas, unas cuantas llamadas y bastantes mensajes de wassap, pero la mayoría del tiempo he estado solo, sentado por norma general en el sillón. Pude encontrarme conmigo, despedirme, reencontrarme, aclarar el pasado, hacer la cuenta de los errores, observar los pensamientos, llorar, meditar, darle forma a un proyecto con jóvenes, fabricar los muebles de mi cocina...... pero me he sentido solo con frecuencia.

La soledad es una manta gruesa y opaca capaz de cubrir la luz del día mas soleado del verano, su peso ralentiza mi capacidad de entablar cualquier tipo de vinculo humano. A medida que pasan las semanas, la situación extraordinaria se ha transformado en la nueva normalidad. 

La soledad me hizo pensar en la cantidad de personas que se encuentran en la misma situación o incluso peor, debido a la cantidad de tiempo acumulado en esta agridulce compañía, a veces necesaria, a veces aborrecida, distinta cuando las buscas a cuando te la imponen. El tiempo de exposición a su radiación acentúa la incapacidad futura de entablar una conversación lucida e interesante, de comenzar un vinculo sea del tipo que sea con otra persona por lo que es una dragón que se muerde la cola, se retroalimenta y refuerza a si mismo.

Pero algo que aprendí es que siempre hay algo que nos ayuda a mantener la esperanza. te contaré algo acerca de Sombra. Nunca hablé de ella más allá del concepto místico de la misma.

Hace 5 o 6 años volvía a casa del trabajo a medio día para cambiarme e ir a por Max al colegio. De repente en mitad de la carretera de camino, se apareció una perra que salía de la cuneta. La visión era dantesca, su cuerpo estaba cubierto de heridas y sangre, caminaba tambaleándose y al verme se detuvo y se quedó mirándome. Si fuese posible, diría que con su mirada me dijo que acabara con su vida, que estaba derrotada. Me detuve en ese momento, la cogí y metí en el coche. Al tenerla cerca pude observar que además de las decenas de agujeros que cubrían su cara, cuello y piernas, tenía un agujero mayor entre las dos orejas por donde se le veía el cráneo. Decidí aceptar su petición, supuse que aquello había sido obra de un humano, así que otro humano debía pagar por el error y darle paz. Recogí rapido a Max y fuimos a sacrificarla. Al llegar le dije a la veterinaria que nos atendió que algo como un tractor debió atropellarla por las extrañas heridas que tenia. La chica la analizó y me dijo: 

"Esta perra no ha sido atropellada, sus heridas son de mordidas, viene de pelear. Como es hembra la utilizan para entrenar a los machos" 

Entonces pregunté el porque del agujero grande entre las orejas y me contestó que era el golpe de gracia, cuando ya no les sirven las matan golpeándolas con algo contundente y las tiran a la cuneta. Nos quedamos helados. 


Allí en la sala fría de la consulta llegados a este momento le dije que procediera al sacrificio y yo pagaría los gastos. Ella me pidió entonces que no lo hiciera todavía, que era joven y tenía una posibilidad de sobrevivir si no tenía partido el cráneo y que podría quedarme con ella, la clínica se haría cargo de todos los gastos pero que no le pidiera que la sacrificara hasta que le hicieran las pruebas. Le respondí nervioso que como iba a quedarme con ella si además de ser raza peligrosa, ya había sido maltratada y usado para las peleas, yo tenía un hijo y tenía miedo de que le pudiera atacar. Ella me dijo que los perros maltratados a tal extremo suelen ser los más fieles y cercanos a sus dueños. Respondí que le hiciera las pruebas y que si era posible me la quedaría. Las pruebas dijeron que podría salvarse. Entonces me preguntó que nombre le pondría y le expliqué que estaba aturdido por todo lo que había ocurrido ese día pero que aparecería el nombre que merecía.

Tras 24 horas en observación la llevamos a casa, debía curarle las heridas durante tres o cuatro meses tres veces al día. Al llegar la dejé sobre una manta en el suelo de la cocina. No andaba por el estado de shock en el que se encontraba. La miraba de vez en cuando y sentía una mezcla de compasión, desolación y miedo a su posible reacción. 

Durante los tres días siguientes no se levantó de la manta. No comió ni casi bebió. Al tercer día por fin lo hizo y entonces hizo algo que no podré olvidar jamas. Vino hacia mí y pegó su hocico a mi pierna. Fuera donde fuera en la casa, ella me perseguía sin dejar el contacto en ningún momento como si estuviéramos imantados, si me detenía se tumbaba sobre mis pies. Tropecé varias veces al liarse entre mis piernas y apunto de caerme en cierta ocasión dije: demonios! Parece mi Sombra!...... Y fue así como apareció su nombre.

Durante las siguientes semanas cuando los conocidos me veían con ella me preguntaban de donde había salido y al explicarle esta historia que acabo de contarte quedaban estremecidos y me daban la enhorabuena por la acción, pues les parecía que había salvado su vida.

Tarde poco tiempo en comprender la verdad de lo ocurrido.

En realidad, fue Sombra la que me salvó a mi.

La soledad es como una fría noche interminable que deseamos que pase cuanto antes para ser calentados nuevamente por los rayos del sol, pero incluso en el momento mas oscuro de dicha tiniebla, puedo ver gracias a la luz que transmite mi Sombra. 

jueves, 17 de marzo de 2022

Dís menos cuatro

Querido lector,
Este camino que hemos recorrido se acerca a su final. no se que beneficio obtuviste si lo has leído estos años, a mi me liberó contarte lo que me ha estado ocurriendo. Hoy voy a compartir contigo algo muy especial.
Hace dos años, Max descubrió que quería programar videojuegos. Cuando vi su necesidad intenté cubrirla con clases particulares pero no era lo que el buscaba, aun con 12 años tenia claro lo que deseaba. El queria programar con una plataforma llamada Unity de EEUU, así que indagamos como podría aprender y vimos que tenia un curso online. Debido a nuestra relación con el método Montessori, creí oportuno que fuera el quien consiguiera ser admitido por su talento en dicha formación, por ello lo invité que escribiera a la central y pidiera ser admitido. La respuesta fue negativa, solo admitían a jóvenes a partir de 16 años.
A principios del año pasado uno de sus mejores amigos a través de la asociación de niños con altas capacidades (este chico lo es) comenzó una formación gratuita para aprender a programar videojuegos, cuando nos enteramos rogamos que admitieran a Max aunque fuera pagando por no ser de estas características. La respuesta fue negativa, solo podían participar chicos con altas capacidades. Tras esta última experiencia hizo algo que aun hoy me hace saltar las lagrimas. Al comienzo de sus vacaciones, comenzó a estudiar programación por su cuenta con tutoriales de Youtube y preguntando en foros de programador. Durante meses lo vi enfadarse, mostrar desesperación cuando no comprendía algo y no tenia quien se lo resolviera, tambien mostró alegría cuando con una perseverancia inhumana consiguió pasar cada bache que se encontró en este camino de aprendizaje. Hace un par de meses Max comenzó a darle clases de programación de videojuegos a este amigo del que hablé y ya a colgado su primer tutorial para el publico en general. No contento con esto, el, su amigo y otro chico amigo de ellos montaron una empresa desarrolladora de videojuegos y ya tienen su primero en proceso de creación.
Hace unas semanas vi una noticia de que aquí en Málaga se llevaba a cabo la nueva convocatoria para participar en el centro de empresas tecnológicas de Málaga con especial atención a las desarroladoras de videojuegos. Al leerlo me dije: son aun muy jóvenes (13 y 14 años) pero ¡Estan haciendo esto!. Llamé al coordinador del programa para Start ups y le conté lo que los chicos estaban haciendo, el responsable me dijo que mejor fuéramos y que se lo enseñaran. Cuando le conté lo ocurrido, Max me respondió: Debo comprarme una camisa nueva para ir en traje chaqueta. Dejamos lo que estábamos haciendo y fuimos a por su camisa.
Días después llegamos a la cita con el coordinador y cuando vio lo que le mostraron dijo que esto debía verlo el director del centro. Al incorporarse este ultimo a la exposición dijo a todos; ¡estos chicos deben trabajar aquí! Quiero a estos chicos con nosotros, le pondremos un mentor, que se reúnan con el responsable de marketing (plubisher) y me da igual si son demasiado jóvenes o aun están en el instituto, buscaremos la forma de que formen parte del equipo. De vuelta a casa de la reunión, daba saltos de alegría en el coche. Yo esperé a llegar a casa para llorar de alegría como no lo había hecho antes. 

Las cosas buenas que me han pasado en la vida me acercaron a la orilla del mar de la felicidad donde pude mojar amablemente los pies. Ver en Max la perseverancia, el tesón y la intención puesta en lograr lo que su corazón le dictaba, su fuerza para vencer los inconvenientes, y la felicidad con la que comparte su experiencia con sus amigos, hizo que pudiera tirarme de cabeza en dicho mar.

domingo, 20 de febrero de 2022

Día menos cinco

Hace unas semanas terminé una relación sentimental en la que estuve el último año. Terminar una relación con alguien que quiero por no poder gestionar lo que ocurría hasta el punto de sentirme bloqueado, me dejó desventado y aturdido. 

Estoy asistiendo a rehabilitación porque me fracturé el menisco interior derecho. El viernes pasado, casi acabando la sesión pregunté al fisioterapeuta si podré y cuando volver a correr. Su respuesta fue escueta: no puedes volver a correr ni hacer ejercicio con carga sobre la rodilla. En ese momento lo tomé con negación mezclado con auto-anestesia. 

Mi voz se debilitó hace dos meses y tengo afonía crónica que ha convertido mi voz en un susurro con tono agudo y sin capacidad de hablar mas de 5 minutos seguidos.


Dejar ir quien soy para llevar a cabo otra forma de vida que no puedo imaginar es desolador por momentos. Aceptación y resignación pugnan por dominar mi mente. Lo único que me alivia es dejarme llevar por el viento frio que silva por las rendijas de mi pensamiento (Manolo García)